10 moralejas de superación y ejemplos de motivación que te sorprenderán
![moralejas](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/10-moralejas-de-superacion-y-ejemplos-de-motivacion-que-te-sorprenderan-660x400.jpg)
Las 10 mejores moralejas de superación:
Moraleja: dícese de la lección o enseñanza que se deduce de un cuento, fábula, ejemplo o una anécdota.
La superación es la capacidad de avanzar, superando los obstáculos que se interponen en el camino, hacia las metas deseadas. Es la capacidad de resistir incluso en tiempos difíciles y seguir adelante.
A continuación, os dejamos 10 ejemplos y moralejas de superación en forma de cuento y/o parábola que esperamos que os gusten y con la que cerramos este 2023.
El mundo actual está lleno de famosos y personas con historias inspiradoras de superación de circunstancias difíciles. Para inspirar a otros a trabajar por el éxito y a no rendirse nunca, aquí tienes 10 ejemplos de superación acompañados de sus lecciones morales.
Si te quedas con las ganas, aquí te dejamos con 10 cuentos de superación e historias de adversidad.
Los mejores 10 ejemplos y moralejas de superación
Comenzamos por un clásico, el cuento de la zorra y la cigüeña:
1. La zorra y la cigüeña
![moralejas](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/La-zorra-y-la-ciguena-son-de-las-mejores-10-ejemplos-y-moralejas-de-superacion.jpg)
La zorra y la cigüeña son de las mejores 10 ejemplos y moralejas de superación
Esta fábula cuenta que una zorra invitó a cenar a su casa a una cigüeña y le sirvió una sopa en plato llano. Cuando llegó la cigüeña, la zorra había servido la sopa en platos poco profundos, para que la cigüeña no pudiera tomar nada. La cigüeña se sintió decepcionada, pero no dijo nada.
Días después, la cigüeña convidó a la zorra a comer, y le sirvió la comida en una alta y fina vasija. La zorra no podía meter su hocico y se quedó en ayunas, mientras la cigüeña, con su largo pico, alcanzó la comida sin problemas.
«Amiga», le dijo a la enfadada zorra, «tú me hiciste ayunar y así te pago con la misma moneda».
La moraleja de este cuento es que las acciones tienen consecuencias: No hagas a los demás lo que no quieres que te hagan a ti. Y es que no esperes salir impune de los actos injustos si tú también los cometes.
2. La fresia que quería ser la flor, fresia
![moralejas](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/Los-mejores-10-ejemplos-y-moralejas-de-superacion-es-La-fresia-que-queria-ser-fresia.jpg)
Los mejores 10 ejemplos y moralejas de superación es La fresia que quería ser fresia
Un rey fue hasta su jardín y descubrió que sus árboles, arbustos y flores se estaban muriendo. El Roble le dijo que se moría porque no podía ser tan alto como el pino.
Volviéndose hacia el pino, lo halló caído porque no podía dar uvas como la vid. Y la vid se moría porque no podía florecer como la rosa. La rosa lloraba porque no podía ser alta y sólida como el roble.
Entonces encontró una planta, una fresia (un bulbo de origen africano), floreciendo y más fresca que nunca. El rey preguntó: ¿Cómo es que creces saludable en medio de este jardín mustio y sombrío?
No lo sé. Quizás sea porque siempre supuse que cuando me plantaste, querías fresias. Si hubieras querido un roble o una rosa, los habrías plantado. En aquel momento me dije: «Intentaré ser fresia de la mejor manera que pueda».
La moraleja de este cuento de lla fresia que quería ser fresia es que no esperes a brillar y no ocultes al mundo lo mejor de ti.
Estás en estas vida para contribuir con tus dones y con lo mejor que puedes ofrecer de ti mismo. No esperes otra ocasión para hacerlo, nunca se sabe quien puede ver tu perfume o fragancia. Estas moralejas de superación nos enseñan que no hay posibilidad de que seas otra persona mejor que tú mismo.
Simplemente mírate a a los ojos y no intentes ser algo que no eres, porque además de hacerlo mál, ocultarás tus tesoros y tus dones al mundo y a los demás.
3. Obstáculos
![moralejas de superación](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/obstaculos-son-de-las-mejores-moralejas-de-superacion.jpg)
Voy andando por un sendero. Dejo que mis pies me lleven. Mis ojos se posan en los árboles, en los pájaros, en las piedras. En el horizonte se recorte la silueta de una ciudad. Agudizo la mirada para distinguirla bien. Siento que la ciudad me atrae.
Sin saber cómo, me doy cuenta de que en esta ciudad puedo encontrar todo lo que deseo. Todas mis metas, mis objetivos y mis logros. Mis ambiciones y mis sueños están en esta ciudad.
Lo que quiero conseguir, lo que necesito, lo que más me gustaría ser, aquello a lo cual aspiro, o que intento, por lo que trabajo, lo que siempre ambicioné, aquello que sería el mayor de mis éxitos.
Me imagino que todo eso está en esa ciudad. Sin dudar, empiezo a caminar hacia ella. A poco de andar, el sendero se hace cuesta arriba. Me canso un poco, pero no me importa. Sigo. Diviso una sombra negra, más adelante, en el camino.
Al acercarme, veo que una enorme zanja me impide mi paso. Temo y dudo. Me enoja que mi meta no pueda conseguirse fácilmente. De todas maneras decido saltar la zanja. Retrocedo, tomo impulso y salto, no consigo pasarla. Me repongo y sigo caminando.
Unos metros más adelante, aparece otra zanja. Vuelvo a tomar carrera y también la salto. Corro hacia la ciudad: el camino parece despejado. Me sorprende un abismo que detiene mi camino. Me detengo. Imposible saltarlo.
Muchas de las dificultades y obstáculos nos las creamos nosotros
Veo que a un costado hay maderas, clavos y herramientas. Me doy cuenta de que está allí para construir un puente. Nunca he sido hábil con mis manos y pienso en renunciar. Miro la meta que deseo y resisto.
Empiezo a construir el puente. Pasan horas, o días, o meses. El puente está hecho. Emocionado, lo cruzo. Y al llegar al otro lado descubro el muro. Un gigantesco muro frío y húmedo rodea la ciudad de mis sueños.
Me siento abatido y busco la manera de esquivarlo. Nada. Debo escalarlo. La ciudad está tan cerca, pero no dejaré que el muro impida mi paso.
Me propongo trepar. Descanso unos minutos y tomo aire. De pronto veo, a un costado del camino un niño que me mira como si me conociera. Me sonríe con complicidad.
Me recuerda a mí mismo cuando era niño.
Quizás por eso, me animo a expresar en voz alta mi queja: ¿Por qué tantos obstáculos entre mi objetivo y yo?
El niño se encoge de hombros y me contesta: ¿Por qué me lo preguntas a mí?
Los obstáculos no estaban antes de que tú llegaras. Los obstáculos los trajiste tú.
Las moralejas de superación como esta historia de los obstáculos nos indican que muchas veces los problemas nos los creamos nosotros mismos.
4. El león sediento
![moralejas d](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/10-moralejas-de-superacion-y-ejemplos-de-motivacion-es-el-leon-sediento.jpg)
El el león sediento es una de las 10 moralejas de superación y ejemplos de motivación
Érase una vez un león que vivía en un desierto. Allí soplaba mucho el viento y por ello, el agua de las charcas en las que habitualmente bebían todos los animales no se quedaba nunca quieta. Las potentes ráfagas rizaban la superficie de las charcas y nunca se reflejaba nada en ellas.
Un día el león se adentró en el bosque, donde solía cazar y en sus tiempos libres jugar, hasta que se sintió algo cansado y sediento. Buscando agua, llegó a una charca que contenía el líquido más fresco, tentador y apacible que nadie nunca haya podido imaginar.
De modo que el león se acercó a la charca, alargó el cuello e intentó beber un buen trago. De repente, vio su propio reflejo y se asustó, al pensar que se trataba de otro león que estaba frente a él.
“Este agua debe pertenecer a otro león, mejor me voy de aquí, con mucho cuidado”, pensó el animal. Retrocedió, pero entonces la sed lo hizo volver de nuevo a la charca. Otra vez vio la cabeza de un temible león con una gran melena que le devolvía la mirada desde la superficie del agua.
El león de esta moraleja de superación se agazapó a la espera del momento oportuno para ahuyentar al “otro león”. Como estaba acostumbrado hacer para marcar territorio o demostrar que se encontraba en un lugar, abrió sus fauces y dio un terrible rugido.
Pero tan pronto como enseñó sus dientes, por supuesto, la boca del “otro león” también se abrió; y a nuestro león esto le pareció una horrible y peligrosa visión.
Una y otra vez el león se apartaba, pero luego tomaba coraje, volvía a la charca y tenía la misma experiencia. Después de un largo rato, sin embargo, estaba tan sediento y desesperado que se decidió: “¡Con otro león o sin otro león, beberé igual de esa charca!”.
Tan pronto como el león hundió su rostro en el agua ¡el “otro león” desapareció!”
La moraleja del cuento del león sediento es que: «No hay peores miedos que los imaginarios, ni peores temores que los infundados o creados por la mente«.
5. La ranita sorda y el agujero
![moralejas](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/la-ranita-sorda-es-una-de-las-mejores-10-moralejas-de-superacion.jpg)
la ranita sorda es una de las mejores 10 moralejas de superación
Una pandilla de ranas viajaba por el bosque, cuando de repente dos de ellas cayeron en un agujero profundo. Las demás se reunieron alrededor del lugar y, cuando vieron lo profundo que era, le dijeron a las ranas que cayeron que era imposible salir y debían darse por muertas.
Sin embargo, ellas seguían tratando de salir del hoyo con todas sus fuerzas. Las ranas de fuera les decían que esos esfuerzos serían inútiles, que nunca podrían salir. Una de las ranas atendió a lo que las demás decían, dejó de esforzarse, se dio por vencida y murió.
La otra continuó saltando con tanto esfuerzo como le era posible. El resto de ranas le gritaba que era inútil pero ellaa seguía saltando, cada vez con más fuerza ignorando a la multitud. Hasta que finalmente consiguió salir del pozo.
Las otras le preguntaron: ¿Acaso no escuchabas lo que te decíamos? La ranita les explicó que era sorda y creía que las demás la estaban animando desde el borde a esforzarse más y más para salir del hueco.
Una voz de aliento a alguien que se siente desanimado puede ayudarle, mientras que una palabra negativa puede acabar por destruirlo.
La moraleja del cuento de la ranita sorda y el pozo es: «No subestimes el poder de las palabras, tienen más poder de lo que piensas».
Y es que estas moralejas de superación nos enseñan a no hacer caso al exterior y no rendirnos nunca.
Nos demuestran que el apoyo es necesario para avanzar y dar pasos hacia nuestras metas, sin importar las probabilidades, pero más importante todavía: ¿Vas a seguir dejándote influir por lo que el exterior dice de ti?
6. El águila y el caracol de Juan Eugenio Hartzenbusch
![moralejas](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/El-aguila-y-el-caracol-es-una-de-las-10-mejores-moralejas-de-superacion.png)
El águila y el caracol es una de las 10 mejores moralejas de superación
Un águila descansaba tranquila sobre su nido situado en lo alto de la montaña más alta de la región cuando vio llegar cerca de donde estaba lo que parecía eran las antenas de un caracol. Asombrada, esperó a que el animal llegara junto a ella y le dijo asombrada:
– Caracol, ¿cómo un animal tan lento ha conseguido llegar a visitarme en un lugar tan alto y difícil de alcanzar?
El caracol, sin sorprenderse demasiado, le contestó:
– Señora águila, subí a fuerza de arrastrarme.
La moraleja de esta historia del águila y el caracol es que: «por muy difícil que parezca, todo lo que deseas en la vida se puede lograr con esfuerzo siempre que insistas una y otra vez en el objetivo».
7. Los tres obreros
![moralejas de superación](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/Los-3-obreros-son-una-de-las-mejores-moralejas-de-superacion.jpg)
Los 3 obreros son una de las mejores moralejas de superación
En la Edad Media un peregrino vio a tres obreros trabajando con grandes bloques de piedra.
¿Qué estaís haciendo?, les preguntó.
-Cortando piedra, dijo uno de ellos con indiferencia.
-Ganándome unos francos, repuso secamente el segundo.
El tercero paró de trabajar por unos minutos y con una gran sonrisa y marcado entusiasmo respondió: «Estoy construyendo la más hermosa y bonita catedral de toda la región”.
La moraleja del cuento de los tres obreros es que: «somos los únicos responsables de nuestro propio destino. Mantén una actitud positiva y comienza a disfrutar de una vida placentera, llena de alegría y motivación
La lección aquí es que nunca hay que dejar de esforzarse por crear algo más grande, y nunca hay que ceder ante el miedo o la duda. Sin duda, es una de las moralejas de superación y aceptación favoritas de esta lista.
8. La tortuga y la liebre
![moralejas de superación](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/La-tortuga-y-la-liebre-son-una-de-las-mejores-moralejas-de-superacion.png)
La tortuga y la liebre son una de las mejores moralejas de superación
La clásica historia de la tortuga y la liebre es otro ejemplo de superación.
Cierto día una liebre se burlaba de las cortas patas y lentitud al caminar de una tortuga. Pero ésta, riéndose, le replicó:
-Puede que seas veloz como el viento, pero yo te ganaría en cualquier carrera.
La liebre, totalmente segura de que no podía perder, aceptó el reto, y le propusó a la tortuga que le dijera el lugar y la hora para la carrera.
LLegado el día de la carrera, arrancaron ambas al mismo tiempo. La tortuga nunca dejó de caminar y a su lento paso pero constante, avanzaba tranquila hacia la meta.
En cambio, la liebre, que a ratos se echaba a descansar en el camino, se quedó dormida. Cuando despertó, y moviéndose lo más veloz que pudo, vió como la tortuga llegaba al final y ganaba la competición.
Las moralejas de superación como el cuento de la tortuga y la liebre se resumen en: «nunca subestimes a ningún adversario ni el poder de la constancia. Piensa que la lentitud y la constancia ganan la carrera, y que se puede conseguir cualquier cosa con trabajo duro y la estrategia adecuada!.
Y es que con seguridad, paciencia y constancia conseguirás la victoria, incluso aunque parezca que vayas lento.
9. La tristeza y la furia
![moralejas de superación](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/tristeza-y-la-furia-son-una-de-las-mejores-moralejas-de-superacion.jpg)
tristeza y la furia son una de las mejores moralejas de superación
Esta moraleja de superación nos enseña que, la tristeza puede vestirse de furia o la furia de tristeza. Lo más importante es aprender a desnudarlas y expresarlas “sin ropa”.
10. Abraham Lincoln, aunque su historia no son parte de las moralejas de superación, merece estar en este listado
![moralejas](https://www.superacion.net/wp-content/uploads/2022/12/Abraham-Lincoln-es-un-ejemplo-y-una-de-las-mejores-moralejas-de-superacion.jpg)
Abraham Lincoln es un ejemplo y una de las mejores moralejas de superación
Vale, esta no es una fábula como tal, pero la historia de Lincoln es uno de los mayor ejemplos de perseverancia en la historia, junto a Shackleton, es el que nos ofreció Abraham Lincoln.
Si queréis saber algo sobre alguien que no se rendía, no busqués más lejos y sigue leyendo.
«El sentimiento del deber está presente en todos nosotros. El deber de luchar es el deber de todos nosotros. Y yo me siento obligado por ese deber».
Nacido en la pobreza, Lincoln tuvo que enfrentarse a la derrota a lo largo de toda su vida. Perdió ocho elecciones, sus negocios quebraron en dos ocasiones y sufrió un colapso nervioso.
Podría haberse rendido muchas veces, pero no lo hizo, y gracias a esa persistencia llegó a ser uno de los presidentes más grandes de la historia de los Estados Unidos.
Lincoln fue un campeón y jamás se dio por vencido. He aquí un esbozo del camino que lo condujo a la Casa Blanca.
- 1816: Su familia se vio obligada a dejar su casa y él tuvo que trabajar para mantenerla.
- 1818 Su madre murió.
- 1831: Fracasó en sus negocios.
- 1832: Se presentó a elecciones para la legislatura y perdió.
- 1832: Perdió también su trabajo; quería ingresar en la facultad de derecho, pero no pudo.
- 1833: Pidió dinero prestado a un amigo para empezar un negocio y antes de fin de año estaba en la bancarrota. Durante los diecisiete años siguientes estuvo pagando aquella deuda.
- 1834: Volvió a presentarse a elecciones legislativas y ganó.
- 1835: Cuando estaba a punto de casarse, su novia murió y él quedó con el corazón destrozado.
- 1836 :Tuvo un colapso nervioso y permaneció seis meses en cama.
- 1838: Intentó llegar al cargo de representante del estado y fue derrotado.
- 1840: Intentó llegar a elector y fue derrotado.
- 1843: Candidato al Congreso; derrotado.
- 1846: Nuevamente candidato al Congreso; esta vez ganó, fue a Washington y realizó un buen trabajo.
- 1848: Se presentó a reelección al Congreso; perdió.
- 1849: Intentó ser funcionario en su estado natal; rechazado.
- 1854: Candidato al Senado de los Estados Unidos; perdió.
- 1856: Buscó la nominación vicepresidencial en la convención nacional de su partido, obteniendo menos de cien votos.
- 1858: Volvió a ser candidato al Senado; volvió a perder.
- 1860: Fue elegido presidente de los Estados Unidos.
«El camino era difícil y resbaladizo. Resbalé, pero me recuperé, diciéndome que aquello era un resbalón y no una caída».
Abraham Lincoln, después de no haber podido conseguir un cargo de senador dijo la frase anterior.
Moralejas de superación: conclusiones
En resumen estas 10 moralejas de superación nos muestran el poder de la fuerza de voluntad, la determinación, el trabajo duro y la resiliencia. Son recordatorios de que nada es imposible si nos mantenemos fuertes y nunca nos rendimos.
Estas historias y moralejas de superación son un estímulo para luchar por la grandeza y alcanzar nuestras metas, sin importar las probabilidades. Juntas, estas historias pueden ayudarnos a darnos cuenta de nuestro potencial y a seguir luchando por el éxito.
Deja un comentario
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.